El plexo visceral, o plexo solar, es uno de los plexos nerviosos más famosos. Forma parte del sistema nervioso autónomo, lo que significa que es responsable de las reacciones de nuestro organismo que son independientes de nuestra voluntad, como la peristalsis intestinal. Descubra cómo se construye el plexo visceral, de qué procesos que ocurren en nuestro cuerpo son responsables y qué interrumpe su funcionamiento.
Tabla de contenido
- Construcción del plexo visceral
- Funciones del plexo visceral
- ¿Se enferma el plexo celíaco?
- Golpear el plexo solar
- Plexo solar: ¿el cerebro en el vientre?
El plexo visceral (plexo solar) se encuentra al nivel de la primera vértebra lumbar, en la parte posterior del epigastrio, en la parte frontal de la columna. Está limitado por el diafragma desde arriba, desde los lados de las glándulas suprarrenales y desde abajo por las arterias renales. Frente a él corre la aorta abdominal.
Coloquialmente, el plexo visceral se conoce como plexo solar. Es un cúmulo de conexiones neuronales, una de las muchas que hay en nuestro cuerpo (aparte del plexo visceral, distinguimos, entre otros, los plexos braquial, cervical, sacro y cardíaco).
El plexo visceral es parte del sistema nervioso autónomo (vegetativo) que inerva los órganos internos.
Característica de este sistema, a diferencia del sistema nervioso somático, es que desencadena reacciones independientes de nuestra voluntad, como la secreción de jugos gástricos o los movimientos peristálticos de los intestinos.
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Construcción del plexo visceral
El plexo solar es una combinación de dos plexos viscerales izquierdo y derecho ligeramente más pequeños. Consiste en una gran cantidad de circunvoluciones, es decir, grupos de células nerviosas cuya tarea es transmitir señales y estímulos a órganos individuales:
- diafragma
- hígado
- bazo
- estómago
- duodeno
- intestinos
- glándulas suprarrenales y riñones
- órganos genitales
- grandes vasos, incluida la aorta
Los ganglios más grandes del plexo visceral son el ganglio mesentérico superior y los ganglios aorto-renales, ubicados en su parte inferior.
Además de ellos, hay muchas bobinas más pequeñas en el plexo solar. Las ramitas nerviosas parten de ellos y los alcanzan, lo que les da un aspecto característico y radiante, de ahí el nombre: plexo solar.
El plexo visceral incluye:
- pares de nervios viscerales, mayor y menor
- ramitas viscerales del nervio vago
- ramitas del último ganglio pectoral y de los ganglios lumbares superiores del tronco simpático
Los plexos más pequeños parten del plexo visceral:
- incluso:
- diafragma
- suprarrenal
- riñón
- nuclear en hombres u ovárico en mujeres
- impar:
- gástrico superior e inferior
- hepático
- bazo
- mesentérico superior
- aórtica abdominal
Funciones del plexo visceral
El grupo descrito de conexiones nerviosas es responsable del correcto funcionamiento de la mayoría de los órganos de la cavidad abdominal. Regula procesos como:
- metabolismo
- secreción de jugo gástrico, bilis, jugo pancreático
- peristalsis del estómago, duodeno, intestino delgado y grueso
- regulación de la tensión del esfínter (por ejemplo, pezón de Vater, píloro gástrico, esfínter urinario o anal)
- el trabajo del músculo cardíaco
- regulación de la presión arterial
- respiración
- el trabajo de los órganos reproductores
- secreción de hormonas por las glándulas suprarrenales, páncreas
- termorregulación
El funcionamiento del plexo visceral es independiente de la voluntad humana, pero asegura la homeostasis, es decir, el estado de equilibrio de los procesos necesarios para la vida.
¿Se enferma el plexo celíaco?
No existen enfermedades primarias comunes del plexo solar. Sin embargo, muchos otros trastornos del cuerpo pueden afectar su funcionamiento.
Por ejemplo, si el cerebro desarrolla una enfermedad aterosclerótica que causa isquemia, encefalitis o meningitis, o un trastorno degenerativo o degenerativo o cáncer, es posible que el plexo visceral no funcione correctamente.
Además, en sus inmediaciones hay muchos órganos y estructuras que pueden causar incluso algo de presión, por ejemplo, aneurisma aórtico, ganglios linfáticos agrandados, quistes renales o suprarrenales, abscesos.
Además, las alteraciones de los electrolitos, ciertas drogas, estimulantes y sustancias psicoactivas pueden afectar negativamente el funcionamiento del plexo solar.
Golpear el plexo solar
Muchas personas, especialmente los niños cuando eran niños, ciertamente han experimentado el dolor que se produce cuando golpean el plexo solar. Es extremadamente fuerte, incluso impactante y, a menudo, deja de respirar durante unos momentos.
Tal dolor se debe al hecho de que el plexo visceral es un enorme grupo de conexiones nerviosas. Entonces el golpe en este lugar se extiende a todo el cuerpo. Tal impacto es particularmente peligroso ya que puede dañar los órganos internos.
Plexo solar: ¿el cerebro en el vientre?
En las teorías alternativas, el plexo solar es el lugar donde se entrelazan los procesos de las esferas espiritual y somática.
Los antiguos taoístas lo llamaron "el cerebro abdominal" y le atribuyeron un papel no menor que el del cerebro real.
Según ellos, las emociones como la ira, el enfado, los celos y el odio surgen cuando se altera el funcionamiento de un órgano, esto se manifiesta en las respuestas fisiológicas que sentimos en el plexo solar.
Pero también a la inversa: el "cultivo" crónico de una determinada emoción negativa (porque positivo significa equilibrio) puede conducir a una enfermedad somática.
Luego están los problemas como insomnio, hipertensión, enfermedades vasculares, infartos, bronquitis crónica, inflamación duodenal, úlceras, gastroenteritis, estreñimiento, diarrea, malabsorción (intestino delgado), calambres menstruales, impotencia, etc.
Sobre el Autor Marta Uler Periodista especializada en salud, belleza y psicología. También es terapeuta dietética por educación. Sus intereses son la medicina, la fitoterapia, el yoga, la cocina vegetariana y los gatos. Soy madre de dos niños: un niño de 10 años y otro de 6 meses.Leer más artículos de este autor