Cifras aterradoras: los enfermos pasan hambre en los hospitales. Como resultado de la desnutrición, la recuperación es más difícil y lleva mucho más tiempo. La desnutrición permanente es un camino corto hacia la próxima enfermedad, por ejemplo, neumonía. La mayoría de los pacientes desnutridos se encuentran en los departamentos de medicina interna y cirugía. 70 por ciento la gente deja algo en el plato, y el 50 por ciento. come media comida.
Los datos sobre la desnutrición de los pacientes se obtuvieron de un estudio que se lleva a cabo el mismo día de cada año en varios cientos de hospitales de Europa. En la imagen, el paciente indica cuánto comió en cada una de las comidas básicas. También se analiza el peso del paciente y otros parámetros que indican el estado nutricional antes del ingreso hospitalario. Después de analizar los datos de Polonia, resultó que el peso corporal y la cantidad de alimentos consumidos disminuyeron significativamente en la mitad de los pacientes que permanecían en los hospitales. Pero también es cierto que 1/3 de los pacientes ingresan en el hospital cuando están desnutridos. Esto no es culpa del hospital, pero hay que tener en cuenta que la desnutrición severa, incluso con una simple operación, siempre significa complicaciones graves, por ejemplo, fusión difícil de tegumentos corporales.
La desnutrición es un problema no solo para las personas delgadas
La desnutrición no se trata solo de personas delgadas. Las personas obesas también pueden tener deficiencias nutricionales que determinan su condición. Hay tres estados de trastornos alimentarios:
- TIPO MARASMUS: cuando el cuerpo no recibe los nutrientes adecuados durante mucho tiempo, lo que significa que pierde peso, los músculos se atrofian, el nivel de glóbulos blancos y rojos desciende significativamente. El paciente primero pierde peso y luego su cuerpo se agota. Un ejemplo clásico de tal desnutrición es la anorexia.
- DEL TIPO KWASHIORKOR, también llamada desnutrición por estrés. Se trata de personas que comen adecuadamente a diario, pero un trauma o estrés severo, como un accidente o una infección grave, hacen que el cuerpo deje de funcionar correctamente. Esta es una situación peligrosa especialmente para las personas con sobrepeso, porque no piensas en alimentarlas.
- TIPO MIXTO, es decir, combinando los dos tipos anteriores de desnutrición. Se aplica a personas que tienen un cuerpo debilitado y que además se ven afectadas por un estrés severo.
Desnutrición: una pirámide de complicaciones
En la práctica médica diaria, la desnutrición se traduce en numerosas complicaciones. ¿Ejemplo? Un paciente bien alimentado ingresado en el hospital con neumonía se recupera en unos pocos días. Si el cuerpo está devastado debido a la desnutrición, el tratamiento durará hasta 3-4 semanas incluso cuando el paciente reciba antibióticos modernos. Esto aumenta los costos del tratamiento, pero también amenaza con más complicaciones, por ejemplo, inflamación del tracto urinario, insuficiencia respiratoria. En todos ellos, independientemente del motivo de ingreso hospitalario, una alimentación inadecuada provoca complicaciones en forma de problemas respiratorios, infecciones, neumonía, atrofia muscular, heridas postoperatorias de mala cicatrización, atrofia de las vellosidades intestinales y alteraciones cardiológicas por deficiencias minerales.
Lleva el caldo al hospital
Cuando un ser querido está en el hospital, debe interesarle no solo las pruebas o procedimientos que se realizan, sino también si el paciente ingiere alimentos. La familia tiene derecho a exigir que su familiar sea tratado correctamente, y uno de sus elementos es una alimentación adecuada. Hay que preguntar si el enfermo come las comidas, si alguien supervisa su calidad, si hay una persona que alimentará al enfermo si es necesario. Si la reticencia a comer se debe al mal sabor de la comida, vale la pena preguntarle a un dietista o médico qué podemos traer de casa. Cuando el personal se compromete a proporcionar su propia comida, conviene recordar que lo mejor para el paciente es una comida de digestión ligera. Un buen ejemplo es el caldo magro. La comida debe estar sin aromas, especias picantes. Servimos compotas caseras, ligeramente endulzadas (se recomienda compota de manzana o pera) y jugos espesos de frutas y verduras, solo con el consentimiento del médico. La dieta se puede variar con verduras hervidas (pero sin verduras crucíferas, porque son favorecedoras) y frutas, embutidos magros (p. Ej., Aves) de buena calidad. Todos los platos deben ser frescos.
ImportanteAlimentación de caldera modesta
La tasa nutricional por paciente en los hospitales polacos oscila entre 4,50 PLN y 30 PLN. La dirección decide la cantidad destinada a la nutrición de los pacientes. El análisis de NIK muestra que el costo promedio de una persona-día de nutrición en un hospital público en 2007 osciló entre 7,70 PLN y 13,68 PLN, limpieza de 1 metro cuadrado por mes de 5,04 PLN a 11,48 PLN y lavado de 1 kg. ropa interior de 2,26 PLN a 5,50 PLN. El costo total de estos servicios es en promedio del 6 por ciento. Costos operativos hospitalarios.
Problema
Alertas NIK: hambriento enfermo
A finales de 2009, la Oficina Superior de Auditoría (NIK) inspeccionó la nutrición de los pacientes en 12 hospitales públicos de 6 provincias. Las conclusiones de la inspección son espantosas. La nutrición no era adecuada en ninguno de los hospitales. En cada segundo, el valor calórico de las comidas, aunque correcto, se basó en ingredientes mal equilibrados. Los menús se prepararon de manera deshonesta porque no proporcionaban el valor nutricional adecuado o las porciones adecuadas de verduras y frutas. Se encontraron deficiencias en cereales y lácteos, administración de embutidos de muy baja calidad, que contenían cantidades excesivas de grasa, y consumo excesivo de sal. En todos los hospitales se superó dos veces el estándar de sal recomendado. Las comidas carecían de calcio, hierro, vitaminas C, B1 y B2, A y E, además de magnesio, potasio y proteínas. Ninguno de los menús cumplía con los estándares desarrollados por IŻiŻ. Las comidas estaban mal equilibradas en términos de valor calórico, valor nutricional y grupos de productos. El valor calórico medio de las comidas se acercó al límite inferior del rango normal y ascendió a aproximadamente 1900 kcal, pero también sucedió que no alcanzó las 1500 kcal. La situación no ha mejorado ahora. Los hospitales recortan costos, despiden nutricionistas y pocas personas están interesadas en la dieta de los pacientes.
"Zdrowie" mensual