El síndrome de la vena cava superior (SVCS) es un grupo de síntomas clínicos clasificados como urgencias oncológicas, ya que afecta principalmente a pacientes con crecimiento neoplásico en la región torácica. El síndrome de la vena cava superior requiere un diagnóstico eficaz y un tratamiento inmediato.
El síndrome de la vena cava superior (SVCS) generalmente ocurre en el curso de cambios proliferativos mediastínicos que obstruyen o impiden el flujo sanguíneo a través de la vena cava. La vena cava superior (VCS) es un vaso venoso de gran calibre. Surge de la unión de las venas braquiocefálicas (izquierda y derecha) y fluye hacia la aurícula derecha del corazón. Recoge sangre de la parte superior del cuerpo: cabeza, cuello, parte superior del pecho. Corre dentro del mediastino superior y medio derecho, muy cerca de órganos y estructuras extremadamente importantes, como el pulmón derecho, la tráquea, el bronquio derecho, la aorta, el tronco pulmonar y los ganglios linfáticos mediastínicos.
Conozca las causas, los síntomas y el tratamiento del síndrome de la vena cava superior. Este es material del ciclo BUENO ESCUCHAR. Podcasts con consejos.
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Síndrome de la vena cava superior: causas
Los síntomas del síndrome se deben a la obstrucción del flujo a través de la vena cava superior. El más común (porque representa más del 80% de los casos) es el cáncer, tanto por su infiltración directa como por la presión externa del tumor en un vaso de paredes delgadas. Las causas cancerosas son principalmente:
- cáncer de pulmón: el más común (70-80% de los casos de SVCS),
- linfoma no Hodgkin,
- metástasis a lo mencionado anteriormente mediastino linfático.
Menos común:
- metástasis del cáncer de mama,
- Tumores de células germinales localizados en el mediastino.
- timomas,
- Linfoma de Hodgkin,
- mesotelioma pleural,
- cáncer de esófago
- cáncer de tiroides.
Con menos frecuencia, en aproximadamente el 20% de los casos, las causas no neoplásicas también pueden ser responsables del bloqueo del flujo de salida a través de la vena cava superior:
- aneurisma de la aorta torácica,
- trombosis venosa asociada con la presencia de un catéter vascular,
- fibrosis mediastínica idiopática,
- fibrosis como consecuencia de mediastinitis crónica,
- tuberculosis,
- Tumores benignos del mediastino.
Síndrome de la vena cava superior: síntomas
La consecuencia de la TVP es el estancamiento y un aumento de la presión arterial venosa en la zona superior del cuerpo, por encima de la estenosis. Los síntomas más comunes son:
- hinchazón de la cara, el cuello y las extremidades superiores;
- un hematoma alrededor de la cabeza y el cuello;
- hiperemia conjuntival;
- llenado excesivo de las venas yugulares.
Además, los pacientes pueden quejarse de síntomas como mareos, dolor de cabeza y alteraciones visuales. En casos avanzados podemos tratar con disnea severa, ronquera, estridor, dolor torácico e incluso trastornos de la deglución. Las quejas pueden intensificarse en la posición supina o en una posición inclinada.
El síndrome de la vena cava superior de desarrollo prolongado conduce a la formación de circulación colateral, una ruta alternativa de salida de sangre venosa al corazón. La manifestación clínica de esta afección son las venas dilatadas visibles en la superficie del tórax.
Las consecuencias más peligrosas de la TVP son principalmente: edema cerebral, edema laríngeo y embolia pulmonar.
Síndrome de la vena cava superior: diagnóstico
En la mayoría de los casos, el diagnóstico del síndrome de la vena cava superior es posible mediante un examen clínico, pero son necesarias pruebas de diagnóstico adicionales en el contexto de un tratamiento adicional. Incluso una radiografía estándar (examen de rayos X) puede revelar un mediastino dilatado y el derrame pleural que a menudo acompaña al síndrome. Sin embargo, la tomografía computarizada (TC) proporciona mucha más información, gracias a la cual es posible diferenciar la causa, la ubicación exacta de la estenosis o la presencia de trombosis. La resonancia magnética (RM) y la venografía son muy buenas, pero están disponibles con menos frecuencia.
Cuando se trata de una causa neoplásica, el examen histopatológico es de gran importancia, especialmente cuando el síndrome de la vena cava superior se diagnosticó antes de que se hiciera un diagnóstico certero. Determinar el tipo de cáncer es fundamental ya que afecta el tipo de tratamiento.
Síndrome de la vena cava superior: tratamiento
El manejo de la TVP puede ser sintomático o causal. El tratamiento conservador incluye la administración de glucocorticosteroides (principalmente dexametasona) y diuréticos. Su aplicación puede provocar una reducción a corto plazo de los síntomas.
Sin embargo, el tratamiento causal es de vital importancia. La radioterapia es el tratamiento de primera línea en pacientes con síndrome canceroso de la vena cava superior. La irradiación mediastínica está especialmente indicada y es eficaz en pacientes diagnosticados de cáncer de pulmón (especialmente cáncer de células pequeñas). La radioterapia suele administrarse de forma urgente, especialmente en los casos en los que el inicio es rápido.
Excepcionalmente, cuando el estado del paciente es grave, la irradiación puede realizarse sin diagnóstico histopatológico previo.
En el caso de los tumores, el llamado La quimioterapia quimiosensible es el tratamiento preferido para los quimiosensibles (p. Ej., Linfoma).
Los procedimientos quirúrgicos paliativos como la angioplastia de acceso vascular combinada con la implantación de un stent o la producción de injertos de derivación se utilizan con menos frecuencia, especialmente en pacientes seleccionados.
Síndrome de la vena cava superior: pronóstico
Debido al riesgo de complicaciones graves, el síndrome de la vena cava superior es una emergencia médica y requiere una intervención urgente. Existen métodos que le permiten reducir los síntomas de manera relativamente efectiva y mejorar la calidad de vida. Sin embargo, el pronóstico depende de la enfermedad subyacente si el síndrome se ha desarrollado como consecuencia de un cáncer. En el caso del cáncer de pulmón, indica un avance significativo del proceso y es un factor pronóstico desfavorable.