Hace dos años noté una verruga en mi uña. Usé Brodacid, que no ayudó. Fui al dermatólogo, me congelé 5 veces, 4 veces no sirvió, en la quinta desapareció por poco tiempo y regresó. Perdí la esperanza de una cura, me acostumbré y me rendí. Tres meses después de la última cirugía (aproximadamente un año y medio desde el inicio) encontré otros 2 grandes, hace unas semanas otros 2, esta vez pequeños. Volví al dermatólogo, me recetó Verrumal, lo que tampoco ayuda. No sé qué hacer, es terriblemente vergonzoso. Escondo la mano en la que tengo las 3 verrugas más grandes. No puedo funcionar normalmente con él. Empecé a trabajar como camarera. No toco la comida, pero sé que tarde o temprano el empleador la verá y perderé mi trabajo de medio tiempo. He estado considerando la escisión quirúrgica o con láser, pero no sé si funciona.
En el caso de las verrugas periungueales, los métodos de tratamiento no son muy efectivos debido a las limitadas posibilidades de remoción radical de la lesión. Más bien, recomendamos la terapia tópica crónica. La elección del fármaco depende de la evaluación clínica de la lesión. Desafortunadamente, la terapia es muy duradera y requiere mucha disciplina y regularidad.
Recuerde que la respuesta de nuestro experto es informativa y no sustituirá una visita al médico.
Elżbieta Szymańska, MD, PhDDermatólogo-venereólogo. Se ocupa de la dermatología clásica y estética. Se desempeña como subdirector del Departamento de Dermatología del Hospital Clínico Central del Ministerio del Interior y como director de para asuntos médicos, Centro de Prevención y Terapia en Varsovia. Desde 2011, ha sido el director científico de los Estudios de Posgrado de la Universidad Médica de Varsovia "Medicina Estética".