El invierno es todo un desafío para la piel. Vale la pena aprovechar las tardes de otoño cada vez más largas para el cuidado de la piel. Con el cuidado adecuado, puede hacer que su piel se sienta bien y también le brindará relajación.
¿Quieres cuidar tu piel en invierno? Antes de ir a la tienda o farmacia para comprar los cosméticos adecuados, primero verifique el estado de su piel. Solo entonces debes ir de compras.
La elección de la crema depende del estado de la piel.
No es la edad, sino la condición de la piel lo que determina el método de cuidado. El aspecto que tendrá en 10 o 20 años depende en gran medida de cómo lo protegimos cuando éramos jóvenes. Por eso siempre vale la pena recordar acerca de hidratar, proteger la piel del sol y los radicales libres. En otoño, es poco probable que el sol nos amenace, pero muchas personas se exceden con las visitas al solárium. La regla es que cuanto más joven es la piel, menos necesita todo tipo de estimulantes. Con la edad, vale la pena aumentar la concentración de principios activos en cosmética. La piel joven se sirve con cremas ligeras, sin ingredientes súper activos, que no te dañarán, pero que aún no son necesarios. La base del cuidado diario a esta edad es una buena hidratación y protección del sol.
Una mujer de cuarenta años debe utilizar sistemáticamente cosméticos que contengan principios activos, por ejemplo, estimular la producción de colágeno, regular la síntesis de elastina, acelerar la renovación epidérmica, etc. Estos incluyen tanto hidroxiácidos como retinol (vitamina A), así como compuestos con efectos específicos, por ejemplo, hidroxiprolina (ASC III). ) y diversos productos de origen natural. Cuando tenga 50 años y elija una crema, debe tener cuidado con las promesas del fabricante: los cosméticos, incluso los muy caros, no harán milagros.
Seguimos utilizando ingredientes cada vez más complejos para estimular y regular la renovación de los tejidos. Aparte de ellos, la crema debe contener anti-radicales libres: vitaminas E y C (esta última en la forma en que puede penetrar la piel) y flavonoides (sustancias naturales anti-radicales, también antiinflamatorias y fortalecedoras de los vasos sanguíneos). Los encontraremos, entre otros en extractos de uva, té verde y corteza de pino mediterráneo (picnogenoles).
A esta edad, no debes olvidarte de complementar tu dieta con vitaminas, especialmente vitamina A, que es un importante regulador de las funciones de la piel. No cometa el error básico de usar una crema muy grasosa durante la noche, que crea una capa en el rostro que retiene completamente el agua y así inhibe la restauración de la barrera epidérmica natural.
Un baño caliente y relajación.
Mientras cuidas tu piel, no te olvides de tu psique también. Esto es especialmente importante en los sombríos días de otoño. Por ejemplo, vale la pena combinar (o complementar) sus diversos tratamientos de belleza y belleza diarios con actividades relajantes. Un baño tibio en varios tipos de bálsamos puede ser ideal aquí. Esto no solo hidratará adecuadamente la piel, sino que también relajará bien. Una gran adición a esto será la luz cálida de las velas. Tiene un efecto calmante y calma los sentidos. Entonces el otoño ya no es terrible.
Super Express