Los niños aumentan de peso durante la cuarentena. Ésta es una de las consecuencias no deseadas pero peligrosas de la pandemia. Los especialistas hacen sonar la alarma: los niños deben empezar a moverse, de lo contrario, estarán en riesgo de contraer enfermedades de la civilización.
La pandemia de COVID ha tenido muchas consecuencias inesperadas y no deseadas. Uno de ellos es el declive de la actividad de los escolares. A tales conclusiones llegaron especialistas de la Universidad de Strathclyde, quienes realizaron investigaciones en 15 países de todo el mundo y publicaron los resultados de sus observaciones en la revista científica The Lancet Child & Adolescent Health.
Tabla de contenido
- Durante la cuarentena, los niños dejaron de moverse.
- La falta de ejercicio es un riesgo de muchas enfermedades.
- Incluso media hora de actividad es algo
- Los científicos asesoran a los padres y a quienes toman las decisiones
Durante la cuarentena, los niños dejaron de moverse.
Encontró que entre el 23 de febrero y el 5 de abril, que es el momento de la pandemia, el tiempo que los niños pasan en lugares como parques, playas y jardines de la ciudad se redujo en casi un tercio. El uso del transporte público se ha reducido a más de la mitad.
Aunque, por supuesto, la prohibición de salir de casa, caminar, jugar al fútbol en los patios escolares y restricciones similares tenían su justificación y probablemente detuvieron la propagación del coronavirus, hicieron otros daños.
No se trata solo del estado mental de los niños (los estudios chinos han demostrado que el 30% de los niños aislados o en cuarentena cumplían los criterios clínicos para el trastorno de estrés postraumático), sino también de su salud física. La cuarentena redujo aún más el nivel a menudo ya bajo de actividad física de los niños.
La falta de ejercicio es un riesgo de muchas enfermedades.
La falta de actividad física promueve la obesidad en los niños, incluso antes de la pandemia se decía que cada vez más adolescentes tenían sobrepeso. La investigación de la OMS de 2017 mostró que el 81% de los niños en edad escolar en el mundo no son lo suficientemente activos físicamente.
La investigación polaca presentó un resultado aún más aterrador: ¡tenemos los niños de 11 años más obesos de Europa! Y esta es la consecuencia más peligrosa de la falta de ejercicio para la salud de los niños.
La OMS advierte que la falta de actividad física aumenta el riesgo de enfermedades de la civilización, como enfermedades cardiovasculares, hipertensión, diabetes y cáncer. La ruptura del tejido adiposo alrededor del abdomen, y más específicamente entre los órganos, se denomina Obesidad visceral, que impide que los órganos internos funcionen correctamente.
Incluso media hora de actividad es algo
El profesor John Reilly de la Facultad de Ciencias Psicológicas y Salud de Strathclyde, que participó en el estudio compilando datos del Reino Unido, dijo que es importante que los niños aprovechen todas las oportunidades para estar físicamente activos, incluso por un tiempo corto.
Puede ser divertido en el jardín de la casa o, en ausencia de uno, una caminata, gimnasia en casa o ejercicios en línea, que actualmente abundan en Internet. También vale la pena aprovechar el hecho de que países individuales, incluida Polonia, ya están eliminando ciertas restricciones: es posible ingresar al bosque, los bulevares y los parques están abiertos, puede andar en bicicleta y scooter.
Los científicos asesoran a los padres y a quienes toman las decisiones
A raíz de la pandemia, los investigadores hicieron una serie de recomendaciones para padres, educadores y maestros para promover actividades saludables durante y después de la cuarentena. Aquí están:
- Siempre aproveche la oportunidad para salir con su hijo o para enviarlo afuera solo, si es de la edad apropiada (observando las regulaciones, por ejemplo, usar máscaras, mantener distancia entre las personas, etc.)
- Trate de que la actividad física sea una parte constante del día; si su hijo aprende de forma remota por la mañana, dele ejercicio, una caminata u otra actividad física por la tarde. Mientras juega, no deje que el niño se siente en un solo lugar, por ejemplo, frente al televisor o la pantalla de la computadora durante más de 30-60 minutos.
- Asegúrese de que su bebé duerma bien y duerma y despierte constantemente. No les permita ver televisión o usar su teléfono inteligente por la noche.
- Los profesionales de la salud deben prestar atención a la posible obesidad durante los exámenes y los balances de salud de un niño, les gusta el sobrepeso y educar a los padres al respecto.
- Los gobiernos nacionales deben promover un comportamiento saludable entre los niños, por ejemplo, mediante campañas sociales que fomenten el deporte y la actividad física.