He tenido la enfermedad por reflujo gastroesofágico durante varios años. Tomar medicamentos (Helicid) todos los días camuflaba el problema. Ahora que estoy en la octava semana de embarazo, el ginecólogo me ordenó que dejara categóricamente de tomar mis medicamentos porque se dice que son dañinos para el feto. Dejé de tomar el medicamento y desde entonces no he podido funcionar con normalidad. A pesar de comer alimentos livianos en pequeñas cantidades, como sopas de ave, bizcochos, budines, rollitos con leche, los síntomas del reflujo no desaparecen. Siento como si tuviera una inflamación en el estómago después de todo lo que como, y también me devuelve la comida con los ácidos del estómago al esófago. Además, también tengo un píloro flojo del estómago, que no retiene la comida en mi estómago pero hace que regurgite. Ya soy impotente, tengo un bloqueo mental para no comer, porque sé que si como, me dolerá, y el embarazo es el momento en el que debo proporcionar varios alimentos a mi cuerpo, cuando no puedo comer. El ginecólogo me recetó la suspensión de Gelatum Alumini, pero lamentablemente es demasiado débil para mis dolencias. Traté de hacer algo yo mismo, bebí linaza, comí almendras, pero nada ayuda. También hubo náuseas. No sé cómo ayudarme, estoy indefenso.
Existe la posibilidad de que la incomodidad disminuya después de la semana 12 y luego podrá comer de manera cada vez más variada. Por ahora, pruebe la leche antirreflujo para bebés. También vale la pena pedirle al farmacéutico que presente una oferta del llamado nutrición médica y ahorrarse en calorías. Estás bajo la supervisión de un médico que se preocupa por el correcto desarrollo de tu bebé y de ti, y si es necesario, intervendrá.
Recuerde que la respuesta de nuestro experto es informativa y no sustituirá una visita al médico.
Iza CzajkaAutor del libro "Dieta en una gran ciudad", amante de las carreras y los maratones.