Con qué frecuencia sucede que una pareja amorosa se siente insatisfecha en la cama. No siempre por la diferencia de temperamento, sino porque no hablan de sus necesidades. A las mujeres, en particular, les resulta más fácil decidir tener sexo que decir qué esperar de un juego amoroso.
Asumimos que si nos amamos, todo saldrá bien por sí solo. Y sin embargo cada uno de nosotros busca algo diferente en una pareja, tenemos nuestros propios hábitos en la cama, un patrón personal de reacciones y una idea de qué condiciones debe cumplir el sexo para ser considerado bueno o muy bueno. No existe un estándar único para el comportamiento sexual o creencias uniformes sobre qué tipo de sexo hará una relación feliz. Por tanto, aunque merece la pena leer y saber mucho sobre sexo, no se puede hacer el amor "como si fuera un libro de texto" ni dejarse influir por lo que podemos encontrar en Internet.
Hablar de sexo fortalece el vínculo
Una conversación abierta sobre lo que nos excita, y lo que preferiríamos no intentar, es importante no solo en la fase inicial de la relación, cuando los amantes se encuentran. También puede contribuir al resurgimiento de la relación erótica, en la que, después de muchos años, la temperatura del coito se ha enfriado un poco, pero afortunadamente ambos han conservado un alto nivel de apertura a nuevas experiencias. A partir de una conversación así, pueden desarrollarse negociaciones eróticas muy agradables que conduzcan a un refresco del juego del amor. Las preferencias sexuales pueden cambiar a lo largo de los años, por lo que es una oportunidad para aprender más el uno del otro, para conocerse mejor desde el lado más íntimo. Y esto profundiza no solo el vínculo erótico sino también emocional.
Encuentra un buen momento
No hay nada reprensible para guiar suavemente la mano de su pareja durante un juego de amor, para indicarle que debería ser "más difícil" o "más rápido". Las conversaciones más básicas sobre el coito no deben tener lugar en la cama, durante el coito o después, porque simplemente estropean el estado de ánimo erótico y pueden percibirse como críticas. Es bueno encontrar un momento de tranquilidad en el que no tengas que apresurarte a ningún lado y nadie te moleste; Es mejor apagar las celdas por este tiempo. La conversación se verá facilitada por una atmósfera de relajación y bondad mutua; nunca hables de sexo emocionalmente durante una discusión, porque la situación puede salirse de control. También es mejor no mencionar el tema cuando otro conflicto sin resolver ha estado latente en su relación durante algún tiempo.
Más en el noveno número de Zdrowie
a la venta a partir del 16 de agosto
COMPRAR ESTE NÚMERO