¿Se pregunta qué hacer para sobrevivir con seguridad al embarazo invernal: no resfriarse, no tropezar con un pavimento helado, no pasar frío? ¿Qué debe tener cuidado de no lastimarse a sí misma ni a su bebé? Aquí tienes una guía práctica para que tu embarazo de invierno sea muy agradable.
El invierno en la ciudad significa atascos de tráfico en las calles, aguanieve o hielo pisoteado en las aceras, frío amargo, gente tosiendo en los autobuses. Es un momento doblemente difícil para usted, aunque solo sea porque cada vez es más difícil moverse. También tiene miedo de contraer un resfriado y, sin embargo, ahora todas las infecciones no solo son un problema para usted, sino también una amenaza para su bebé. Y la falta de luz: días cortos y nublados, tardes tempranas que a veces te hacen sentir triste.
¿Cómo sobrevivir a un embarazo invernal, de forma segura y en buena forma mental?
Embarazo de invierno: vístase abrigado
Cuando sales a la calle, las botas de invierno resistentes son muy importantes, no solo cálidas, sino también cómodas. El vientre ahora ha cambiado su centro de gravedad, lo que puede dificultar el equilibrio. Olvídese de las botas de tacón, es una tortura para la columna vertebral y, además, en un pavimento resbaladizo puede caerse o torcerse la pierna fácilmente. Además, las botas de caña larga son mucho más difíciles de poner y quitar, especialmente si ya tienes una barriga grande. Lo mejor son los botines de piel, sobre suela de goma maciza con pisada (en zapatos con suela de plástico es fácil de deslizar). Los más cómodos serán abrochados con cremallera o velcro, y no atados con cordones.
Recuerde los guantes, la bufanda y el sombrero: la mayor parte del calor corporal se escapa por la cabeza. Vale la pena que la prenda exterior tenga capucha, que además protegerá del viento y la nieve.
La chaqueta o el abrigo deben ser ligeros y fáciles de desabrochar rápidamente (por ejemplo, con botones de presión) cuando hace calor en el autobús o en la tienda.
Es importante evitar el sobrecalentamiento: cuando sudas, el frío está listo. Vístase en capas: sobre una blusa, debajo de una chaqueta, use una camiseta sin mangas o un suéter. Esto le permitirá regular su temperatura corporal con mayor facilidad. Mantenga una ropa interior de guardia en el trabajo: un suéter o una bufanda abrigada; puede suceder que la calefacción falle. Cuando esté esperando en la parada del autobús, no se quede quieto: camine, golpee con los pies, no se enfríe.
Embarazo en invierno: cuida tu estómago
Cuando hace frío, el cuerpo necesita más energía. ¡Cumpla con la regla básica de nunca salir de casa sin desayunar! Si todavía se siente enfermo por la mañana, al menos tome una taza de té y unos bizcochos o queso crema, y lleve sus sándwiches al trabajo para el almuerzo.
Trate de comer con regularidad, con no más de 3-4 horas entre comidas. Además, siempre tenga a mano bocadillos saludables: barras de muesli, frutos secos o un puñado de semillas de girasol. Si es necesario, puede "recargar las pilas" rápidamente o superar las náuseas que a menudo se presentan cuando tiene hambre.
Embarazo en invierno: disfruta caminando
Si bien es más difícil mover tu barriga, no siempre querrás salir cuando el clima está debajo de tu perro. Pero no dejes que el invierno te detenga. Todos los días agradables deben utilizarse para hacer ejercicio al aire libre. Se oxigenará a usted mismo y a su bebé, ahuyentará la tristeza del invierno y su cuerpo producirá una dosis de vitamina D bajo la influencia del sol, que ambos necesitan ahora (protege contra la descalcificación).
Los deportes de invierno (esquí, patinaje sobre hielo) obviamente no son recomendables para usted, porque es fácil caerse mientras se esquía, pero, por ejemplo, la marcha nórdica (en el primer trimestre) o una simple caminata por el bosque o el parque es una gran relajación. Moverse en el aire no solo lo mantendrá en forma, sino que también lo hará más resistente al frío y las infecciones. También recomendamos la gimnasia: apúntate a las futuras mamás o practica en casa sola o en pareja.
Embarazo en invierno: un calentamiento rápido
Desafortunadamente, puede suceder que sienta frío afuera. Cuando llegues a casa, date una dosis de calor: come un plato de sopa caliente o bebe una taza de té o leche con miel y calienta tus piernas en un recipiente con agua tibia. También puede tomar un baño corto (hasta 15 minutos) en agua tibia (no caliente - hasta 37ºC); Abrígate bien después de salir de la bañera o salta inmediatamente debajo de las mantas.
Embarazo de invierno: duerma lo suficiente y descanse lo suficiente
En invierno, el cuerpo indica que necesita dormir más. El fenómeno se agrava en el embarazo: los ataques de somnolencia son característicos, especialmente durante el primer trimestre. No te defiendas de eso. Corre más tiempo en los días libres. Sin embargo, recuerde que no puede dormir lo suficiente y no se caiga de la noche a la mañana: ¡8 a 9 horas de sueño por noche es un mínimo absoluto para usted!
Durante el sueño, el cuerpo se regenera después de hacer ejercicio todo el día. Si puedes permitirte una siesta por la tarde, genial. Descansado, serás mucho más resistente a las infecciones.
Y cuando sienta que algo lo está tomando, beba una taza de leche con miel y vaya a la cama temprano; se sentirá mejor al día siguiente. Nuestras abuelas solían decir que dormir es el mejor médico.
Embarazo en invierno: evita a las personas resfriadas
Evite las grandes multitudes de personas. Haga una cita en el trabajo, si es posible, que vendrá un poco más tarde, cuando los autobuses y tranvías estén menos concurridos. En una tienda, oficina de correos, oficina o clínica, evite a las personas que tienen tos.
No siempre es posible alejarse de sus vecinos fríos, por ejemplo en un autobús lleno de gente. Luego saca un pañuelo y cúbrete la nariz y la boca con él. Lávese las manos inmediatamente cuando llegue al trabajo y regrese a casa; reducirá el riesgo de infección.
mensual "M jak mama"