Durante la pandemia de coronavirus, solo uno de cada tres polacos decidió irse de vacaciones. Entre los destinos de viaje más populares todavía se encuentran países donde la incidencia de COVID-19 es peligrosamente alta. Por tanto, ¿el empleador tiene derecho a conocer la dirección de nuestro viaje de vacaciones? El abogado explica este tema.
El Código Laboral y el GDPR regulan el alcance de los datos personales del empleado que el empleador tiene derecho a conocer. La información sobre su paradero durante la licencia pertenece al ámbito de su vida privada, sobre la que el empleador no tiene derecho a preguntar.
Sin embargo, en tiempos de una pandemia, muchas personas se preguntan si esta información debería ser pública para evitar posibles consecuencias negativas para la empresa. Puede suceder que un empleado se enferme con COVID-19 durante sus vacaciones y luego infecte a otros colegas; tal situación puede amenazar el funcionamiento de la empresa y la seguridad de sus empleados, por lo que el empleador es totalmente responsable.
¿El empleador tiene derecho a saber a dónde va de vacaciones?
La respuesta a esta pregunta es controvertida. Como explica Ewelina Kozłowska-Kowalczuk, asesora legal de Kopeć Zaborowski Adwokaci i Radcowie Prawni, el empleador no tiene derecho a hacernos tal pregunta según la ley, a menos que viajemos fuera de la Unión Europea, lo que implica una cuarentena de dos semanas. Durante este tiempo, el empleador tiene que organizarnos un reemplazo.
Sin embargo, existe una excepción que podría explicar una pregunta tan personal. - El empleador es responsable de asegurar a los empleados, es decir, garantizarles condiciones de trabajo seguras e higiénicas. Además, cuando el empleado tiene contacto directo con los clientes, en mi opinión, el empleador puede hacer esa pregunta, atendiendo tanto a los clientes como a los colegas con los que el vacacionista entrará en contacto después de su regreso. Sin embargo, esto no está estrictamente regulado por la ley y es controvertido entre los especialistas en el campo del derecho laboral. Por supuesto, puede pedirle al inspector jefe de trabajo que tome una decisión al respecto, pero debe abordar estas situaciones con sentido común, explica Ewelina Kozłowska-Kowalczuk.
Según el abogado, lo mejor sería que el propio empleado informara voluntariamente a la empresa a dónde se dirigía de vacaciones antes de irse, pero no existe tal obligación. Si se niega a proporcionar dicha información, el empleador no puede imponerle ninguna sanción, como el despido disciplinario.
Sin embargo, si el empleador sospecha que su empleado ha regresado de áreas con un mayor riesgo de infección por SARS-CoV-2, puede derivarlo a trabajar de forma remota. Esta posibilidad la ofrece el escudo anti-crisis 4.0 recientemente introducido.
Fuente: newseria.pl